Una solución que no esperaba. Gracias a Dios.

 

Noemí Fernández.

 

Me detectaron cáncer de mamas. Estaba aterrorizada porque conocía otros casos donde tuvieron que someterse a la quimio, cirugía para extraer una o las dos mamas y los ganglios pasando por un sufrimiento atroz para no lograr la cura, sino prolongar la expectativa de vida, si a eso se le puede llamar vida, que además arrastra a toda la familia. Me contaron de estos tratamientos y dije; probar no cuesta nada, si me va mal siempre estoy a tiempo de hacer el tratamiento habitual y si me va bien, además de lo económico, soluciono el problema sin pasar por las complicaciones de la quimio y el quirófano que significaba la destrucción corporal y un problema que influía fuertemente en mi vida social. Entonces decidí iniciar el tratamiento natural. Al principio no se notaban grandes cambios, pero a las pocas semanas, comencé a notar que las calcificaciones se empezaban a reducir. Hoy gracias a este tratamiento, estoy totalmente curada. Para mi fue una bendición.

 

Josefina Aranda.

 

Me detectaron cáncer de mamas. Estaba aterrorizada porque conocía otros casos donde tuvieron que someterse a la quimio, cirugía para extraer una o las dos mamas y los ganglios pasando por un sufrimiento atroz para no lograr la cura, sino prolongar la expectativa de vida, si a eso se le puede llamar vida, que además arrastra a toda la familia. Me contaron de estos tratamientos y dije; probar no cuesta nada, si me va mal siempre estoy a tiempo de hacer el tratamiento habitual y si me va bien, además de lo económico, soluciono el problema sin pasar por las complicaciones de la quimio y el quirófano que significaba la destrucción corporal y un problema que influía fuertemente en mi vida social. Entonces decidí iniciar el tratamiento natural. Al principio no se notaban grandes cambios, pero a las pocas semanas, comencé a notar que las calcificaciones se empezaban a reducir. Hoy gracias a este tratamiento, estoy totalmente curada. Para mi fue una bendición.

 

Clara Quevedo.